sábado, 5 de febrero de 2011

postheadericon El zoo cap. 13






Paul estaba en el tanatorio con el cadáver de su madre.

PAUL: ¿Quién te ha hecho esto? (llorando) 

Cogió el teléfono.

PAUL: Natalia.
NATALIA: Dime.
PAUL: Han encontrado muerta a mi madre.
NATALIA: ¿Cómo? ¡Oh! No. Voy en seguida. ¿Estás en el tanatorio?
PAUL: Sí, no avises a mucha gente más, quiero que sea un entierro tranquilo. 
NATALIA: ¿Y a tu padre? O sea a su marido.
PAUL: Estaban separados, pero bueno, le llamaré.

Natalia se vistió y antes de salir de casa habló con su hija.

NATALIA: Cariño, pórtate bien y no abras la puerta a los extraños.
ÁNGELA: Mamá, no quiero quedarme sola.
NATALIA: Pero cariño, yo tampoco quiero que vayas al tanatorio.
ÁNGELA: ¿Y si vuelve a venir la niña esa?
NATALIA: Cariño, duérmete y ya verás como no la tienes que ver… anda, adiós.
_______________________________________________________________

Natalia llegó al tanatorio.

PAUL: ¿Y la niña?
NATALIA: La dejé en casa, no quiero que vea esto. ¿Por qué lo preguntas?
PAUL: ¿No puedo interesarme por ella?
NATALIA: Claro que puedes…
PAUL: Mi padre Henry está al venir.
NATALIA: Así le conozco…
PAUL: Por teléfono parecía muy afectado. Yo creo que en el fondo el seguía enamorado de mi madre.

En ese momento, se oyó a alguien suspirar tras la puerta del tanatorio.

PAUL: ¡Chist!

Paul la abrió de golpe, y un señor mayor estaba ahí.

PAUL: ¡Papá!
HENRY: Hijo… cuando me he enterado de lo de tu madre, casi me da un infarto.
PAUL: Si… bueno, ya hace vario tiempo que había desaparecido hasta que la hemos encontrado… no he querido decirte nada antes.
HENRY: Tú sabes, que yo a pesar de todo, a tu madre la quería. Pero éramos incompatibles hijo, que se le va a hacer. 

NATALIA: Ejem…

PAUL: ¡Ah! Papá, te presento a Natalia… Mi novia. Natalia, el es Henry, mi padre.
HENRY: A sus pies señorita, es usted muy bella.
NATALIA: Gracias.
PAUL: Papá, ¿qué hacías escuchando en la puerta?
HENRY: Hijo, tengo que contarte algo muy serio.
PAUL: ¿¡QUÉ!?
_______________________________________________________________

Rodrigo se sentó en la fuente del zoo. A su cabeza le vino un recuerdo de cuando el tenía 15 años…
Flashback Hace 18 años:
Iba pasando por enfrente de un cementerio con unos amigos, esa noche había salido de paseo. Sonaban unos gritos provenientes de el.

FRANCISCO: ¡Callaos!
ALBA: ¿Qué pasa?
RODRIGO: Eso ¿qué pasa?
FRANCISCO: ¡Oíd las voces!
ALBA: Vienen del cementerio…
FRANCISCO: Sí, ¿vamos a ver qué es?
ALBA: Debemos ir… parece alguien en apuros.
RODRIGO: No, yo no pienso entrar en un cementerio de noche. Y más sonando esos gritos.

Francisco, tras las palabras de su amigo comenzó a rajarse.

FRANCISCO: Pues… pues va a ser que sí… llevas razón. Mejor no ir.
ALBA: ¿Qué pasa? ¿Os estáis rajando? ¡Vamos a ver!
RODRIGO: Alba no. ¡A mí me da muy mala espina!
ALBA: ¡Pues voy yo narices!

Los gritos seguían sonando más y más fuertes. Alba se acercó a las puertas del cementerio.

ALBA: ¿Hoooooooooooooolaaaaaaa? ¿Hay alguien ahí?

Los gritos cesaron instantáneamente.

ALBA: ¿Hooooooooooolaaaaaaa?

De repente unas manos agarraron a Alba de las piernas tirándola al suelo. Rodrigo pudo ver un enorme anillo que reflejó en una de las manos. Después fueron arrastrándolas adentro del cementerio.

RODRIGO: ¡Tío! ¡Vamos a ayudarla!
FRANCISCO: Joder que mal rollo… yo me voy.

Francisco salió corriendo. Rodrigo se quedó solo, debía ir a ayudar a su amiga. Finalmente, a pesar de que ella estaba gritando socorro, salió también el a correr, acobardado.


Rodrigo cogió su móvil y llamó.

RODRIGO: Ya estoy en el zoo….
FRANCISCO: ¿Seguro que es el sitio?
RODRIGO: Si, sí, aquí era el cementerio. Es el lugar.

En el tanatorio…

HENRY: Verás hijo… tu madre y yo teníamos mucho dinero y eso dio origen a nuestras riñas… y claro… ella se empeñó en montar el zoo. Pero precisamente quiso montarlo encima de ese cementerio.
PAUL: Pero eso ¿no es ilegal?
HENRY: No me preguntes como, pero consiguió entre tanto papeleo construirlo… estaba obsesionada. Y yo no la quise apoyar, así que nos divorciamos. Siento mucho que tu lo hayas pasado tan mal.
PAUL: Ya papá… pero ¿por qué se empeñó en construirlo justo ahí?
HENRY: Tu madre… tu madre no tenía el cielo ganado hijo, créeme. 
PAUL: ¿Qué pasó?
HENRY: ¡Bah! Mejoro te lo cuento… fue un escándalo. Y no te apetecería saberlo…
NATALIA: Pero es su madre, y lo necesita saber.
HENRY: Tu madre no es una santa hijo, ya te lo digo desde ya. Y mejor me voy porque es tarde.

Se levanta.

PAUL: Bueno, al menos quédate aquí la noche, has hecho un viaje largo. Mañana después del entierro ya te vas.




Al día siguiente en el zoo…

RODRIGO: Por cierto… ¿tu nombre es?
LOLA: Lola. Soy Lola.
RODRIGO: Bien, Lola, espero que lo hagas lo mejor posible

En ese momento, entraban Paul y su padre.

HENRY: Bueno, yo solo tomo un café ¿vale?
PAUL: Vale. ¡Huy! ¿Tu quien eres?
LOLA: ¿Yo? Pues Lola.
PAUL: ¿Qué Lola? ¿Dónde está Marta?
LOLA: ¿Marta? Mi hija Marta está indispuesta. Ahora llevo yo el restaurante.

Paul se alejó de la barra. Nacho entró en ese momento.

PAUL: ¿Y esto? ¿Nacho?
NACHO: Si, ayer Marta se fue, ha dejado el negocio a su madre. Está enferma, ella es su madre, la nueva encargada.
LOLA: ¡Eh! Que ella tiene nombre… Soy Lola. La nueva y sexy camarera…
NACHO: Huy si… sobre todo eso.
PAUL: Bueno… el entierro es en una hora. No hace falta que vayáis, quedáos aquí, el zoo os necesita.

Paul y su padre se marcharon. Lola cogió a Nacho por la sudadera.

LOLA: ¡Eh! Tú.
NACHO: ¿Qué pasa?
LOLA: ¿Eres Nacho verdad?
NACHO: Si.
LOLA: Este director no es trigo limpio.
NACHO: ¿Por?
LOLA: Sin querer le he mirado en los cajones de su escritorio y tenía una carpeta del Proyecto Maponto.
NACHO: ¿Eing? ¿Qué es eso?
LOLA: Mi hija Marta trabajaba ahí.
NACHO: ¿Y de qué iba el proyecto ese?
LOLA: No lo sé. Pero no era nada bueno… nunca me lo quiso decir.

De repente, Rodrigo interrumpió.

RODRIGO: ¿Algún problema?
LOLA: No, nada… aquí hablando.

Al salir, en la puerta del zoo estaba Francisco, el viejo amigo de Rodrigo.

FRANCISCO: Nuestro plan es un poco estúpido. Hace ya muchos años de lo que pasó y si entonces nos cagamos de miedo y no la ayudamos, ahora es más difícil.
RODRIGO: Las cosas han cambiado, querido.

Rodrigo le dio un golpe a Francisco en toda la cabeza.

Paul, Natalia, Henry y muchas más personas daban el último adiós a Celia. En ese momento, su ataúd estaba bajando a tierra.

SACERDOTE: En el nombre del padre, del hijo y del Espíritu Santo. Podéis ir en paz.

PAUL: Bueno… por lo menos ya no sufrimos más.
NATALIA: Eso es verdad, ahora ya sabemos donde está. Pero ¿qué le pasó? ¿cómo acabo enterrada en una cuneta?
PAUL: Alguien le hizo eso.
NATALIA: Vamos a casa.

Rodrigo se acercó a la fuente del zoo. Sin que nadie lo viese, se agachó al suelo y levantó un azulejo, después pulsó un botón. La fuente se abrió y dejó a descubierto una puerta secreta. Tras la puerta había una escalera. Rodrigo la bajó con el cuerpo de Francisco. Pasó por unos pasillos y en una estancia abrió la puerta y había una mujer. Allí dejó a Francisco, que aún continuaba inconsciente.

ALBA: Eres un hijo de puta.
RODRIGO: Que durmáis en paz.
Flashback hace 18 años:
RODRIGO: Sí, solo debo atraer a mis amigos al cementerio. Hacer que uno de ellos entre y le capturáis. Luego incito al otro amigo para que vaya a rescatar al que desapareció primero y así los tenéis a los dos. Los cogéis y los metéis bajo tierra, en la celda.
CELIA: Sí, que todo sea por el Proyeto Maponto.
RODRIGO: Así haré.


ALBA: ¿Por qué no me dejáis salir de aquí?
RODRIGO: Lo siento mucho, pero ambos debíais estar aquí desde hace ya muchos años. Tu si has estado, pero hasta hoy Francisco no.
Flashback hace 2 años:
CELIA: Sí, voy a construir el zoo sobre el cementerio. Así la puerta al subterráneo estará más camuflada y tendré todo más controlado.
RODRIGO: Si algún día te pasara algo, yo llevaré el zoo.
CELIA: Sí. Procuraré mantener a mi hijo Paul y a Henry al margen del todo. Además, he metido a trabajar a Marta en el zoo. Así podrá ayudarnos cada vez que quiera.


ALBA: ¡Quiero saber la verdad!
RODRIGO: Muy pronto la sabrás.

Rodrigo salió de la celda.
Flashback hace una semana:
MARTA: Ha llegado el momento de que entres tú en acción.
RODRIGO: Yo me encargaré del zoo. Tú debes abandonar tu trabajo y quedarte abajo en el subterráneo. Te necesitamos. Además, hemos perdido el contacto con la nave…
MARTA: No te preocupes, he llamado a mi madre Lola, ella estará en el zoo, así podré estar en el subterráneo.


Es curioso, la verdad que ocultaba Celia y toda la historia del Proyecto Maponto. Proyecto Maponto, un proyecto que lleva 18 años en funcionamiento. Por ello Celia quiso construir el zoo sobre el cementerio, para tener segura la entrada al subterráneo, pero dos cosas han fallado en el plan. La primera, que Francisco no picó en la trampa y no quiso entrar en el cementerio y otra es que la nave que salió con destino a la Luna la destruyó un asteroide.


0 comentarios: