postheadericon La Víctima cap. 5

Capítulo 1x05 (05): El reencuentro

Eugenio estaba en una barca, en medio de un río. Miró sus piernas y llevaba una bomba junto a el. Entonces se puso muy nervioso y movió la bomba. Entonces una cuenta atrás se activó y la bomba llegó a cero y...

Eugenio se despertó. Se había quedado dormido en el parque. Entonces recordó la cruda realidad. Esa mañana, no quiso ir al instituto. Ya de saber que su profesora estaba en el ajo, le daba terror pisar el centro. Después se acordó de Patricia, su hermana menor, que había muerto de una manera tan desastrosa.

Se levantó y anduvo durante varias horas hasta llegar lo mas rápido que pudo hasta el río Ebro. El río parecía interminable y era imposible encontrar el sitio donde se hallaba metida su madre.

Lejos de allí en un bunker bajo tierra. La madre de Eugenio se hallaba en la nave-bunker. La habían vuelto a sentar en la silla después de que intentara liberarse. Esta vez no podría escapar. Entraron unas personas. Lleban con ellos el cadáver de su hija Patricia, la hermana de Eugenio. Lo dejaron el cuerpo inerte frente a ella.

Tío del abusón Mira que guapa esta tu niña, cada día la veo mejor y todo.

Madre: Muérete en el infierno cabrón.

Empezó a llorar desconsoladamente la madre y en ese momento sonaron unos goples en el techo, entonces sonó “¡Mamá!” Era la voz de Eugenio, estaba buscando a su madre. El bunker subterráneo pasaba por debajo del terreno al lado del río. Y en ese mismo momento el desesperado Eugenio pasaba por encima buscando desconsoladamente a su madre.

Madre: ¡Hijo estoy aquí!

Gritó la madre. Eugenio la pudo oír y pegó bien la oreja al suelo.

Eugenio: ¡¿Mamá?! ¿Estás ahí?

El desconsolado reencuentro entre la madre y el cadáver de su hija solo iniciaba unos meses infernales para la familia de Eugenio.

Entonces, el tío del abusón subió arriba por un largo ascensor que llevaba hasta una vieja casa cerca de donde se encontraba Eugenio y que precisamente era la zona por donde se bajaba al bunker.

El hombre agarró a Eugenio y lo hizo entrar en la caseta y bajar por el ascensor. Abajo, Eugenio pudo ver a su madre. Allí también estaba la profesora Matilde junto al cadáver de la hermana

Profesora Matilde: Me parece curioso que no me hayas reconocido. Yo soy Martaa ¿Me recuerdas? Te llamé por teléfono pinchando mi verdadera voz para que no me reconocieras, ¿Te acuerdas de lo ocurrido en el chat?
Eugenio: ¿Tu eres Martaa? Debí haberlo sabido. ¿Y esto que es? ¿Este gran sótano qué es para que sirve?

El tío del abusón aporreó a Eugenio fuertemente y lo dejo en el suelo. Mientras tanto, la madre del chico se tenía que conformar con insultar al hombre y lamentarse de la pérdida de su hija menor.

Cuando Martaa (profesora Matilde) y el tío del abusón se fueron, Eugenio habló a su madre.

Eugenio: Se han ido. Nos han bloqueado el ascensor y nos han dejado aquí encerrados. Mama, papá ha muerto. Murió hace cuatro días en el campamento. Lo encontraron colgado. Se suicidó...

Madre: Lo siento mucho...Eugenio yo ya sabía que se había suicidado. Me lo comunicaron en el día. No quise decirte nada por el momento, prefería esperar. Lo siento mucho...

Eugenio miró la muñeca de su madre. Tenía un cable conectado a ella. Siguió el cable y un contador que iba en ese momento por 59 minutos estaba dando marcha atrás segundo por segundo. ¿Qué pasaría dentro de una hora?